Mittwoch, 16. Dezember 2015

Los dos

Los dos

Cuando uno de ustedes se desinfla triste por el suelo
el otro está por reventar de alegría en el aire.

Cuando uno de ustedes dice ser mi amigo
el otro habla enojado consigo mismo.

Cuando el otro sonríe
el otro frunce el ceño.

Cuando el otro me susurra locamente la palabra guapa
el otro duda de su nombre.

 Quiero ser Natalia sola.

Ya me da lo mismo no ser anaconda
si no me puedo bañar en ningún río.

Natalia Lévano Casas
Heidelberg, 16 de diciembre de 2015

Donnerstag, 10. Dezember 2015

Como no eres mi casero

Como no eres mi casero,
ni cuido a tus hijas,
no saldré más al mostrador
ni tampoco a la ventana.

Ve por la que toca tu puerta traviesamente,
o por su igual hermana.

Para otro lado voy yo.
Ya no me atrapas, ni me hieres.
Porque ni soy tu casera,
ni cuido a tus hijas.



Natalia Lévano Casas

Heidelberg, 10 de diciembre de 2015

Sonntag, 22. November 2015

Y todas revoloteaban

Y todas revoloteaban
delante de un gigante rompecabezas,
cuyas piezas eran amarillas, verdes y naranjas.
Algunas se detenían luego en unas columnas,
otras en las ventanas,
que por sucias el sol ponía al descubierto.

Esas que revoloteaban eran muchas,
 calladas.
Llevaban vestidos de color rojo y negro.
Y si dejabas abiertas las ventanas
podían entrar en tu casa.

Ya dentro de tu casa
oías castañuelas frágiles,
que paraban de sonar
apenas caía el telón del sueño.


Natalia Lévano Casas

Heidelberg, 22 de octubre de 2015




En tu sueño

En tu sueño
 bailábamos
éramos locos
bailábamos
entre músicos y bailarines
con músicos y bailarines
bailábamos
como locos.

En una de esas,
yo te lancé por los aires
caíste estrepitosamente.
Reías al contármelo.

Y creyendo yo que todo había sido realidad
y arrepentida por mi fuerza
te pregunté si te había lanzado así,
como en el cuadro de Chagall.


Natalia Lévano Casas
Heidelberg, 22 de noviembre de 2015.

El Paseo de Marc Chagall

Sonntag, 4. Oktober 2015

Esta lluvia y este cielo gris


Esta lluvia y este cielo gris
borran el día de ayer
borran a sus personas
borran a los ciclistas que pasaron por mi lado
pero también borran tus ojos.


Es mejor no ser anaconda en este mundo tan pálido,
lleno de caseras y de compras.
Acomódate tú en una esquina con lo que pagas.

No me llames,
ni en el sol ni en la lluvia.
Y si te veo,
y te encuentro en un rincón
hablando igual:
Me largaré lentamente.

Me verás como borracha,
o a veces como anaconda.
Si me ves como anaconda
 es porque trago letras,
o escupo cólera ,
 a veces,
pero no por ti,
sino por mí.


Natalia Lévano Casas

Heidelberg, 4 de octubre de 2015

Donnerstag, 10. September 2015

El transporte público en San Petersburgo (Primera parte)

Al llegar al Aeropuerto Internacional Púlkovo en San Petersburgo no sabía cómo llegar a la parada de metro cercana a la casa donde viví por siete días.  En el aeropuerto una mujer policía me explicó como llegar a la estación de metro más cercana, la más cercana era la estación Moskovskaya , desde allí , desde esa estación tendría que ver cómo llegar a la Estación de Metro Sportivnaya. Desde el aeropuerto es muy fácil llegar a la Moskovskaya, se puede llegar en taxi o en bus, a propósito me acordé de Lima en la pregunta de dos taxistas que se me acercaron: "¿Taxi? "Aunque en Lima nunca son sólo dos. Yo fui con un bus pequeño a la estación de metro. En el bus pagué 40 rublos, hay otro bus que cuesta 28 rublos, es el bus más grande. Estando en  el bus pequeño recordé  las combis de Lima, aunque el chófer viajaba con delicadeza, esto último lo digo recordando a los chóferes de combi de Lima, por supuesto.
El dinero lo pagué al final del viaje, se lo di al chófer. No había nadie que insistentemente me pidiera el dinero desde un principio.
Cuando llegué a la estación Moskovskaya me acerqué a la boletería, y claro que esperaba un boleto, o un ticket o un billete, bueno, como quieran llamarlo. Al ver que la vendedora me dio muchas monedas, le reclamé por no haberme dado el boleto. Resulta que entre todas las monedas estaban las monedas del metro.
Todas las fotos de abajo las tomé con mi celular.
Estas monedas sirven para poder entrar al metro. La foto de la derecha señala la parada
del metro adonde siempre iba.
La foto la tomé en la estación de metro que se llama Sportivnaya. Todo esto a trescientos metros de profundidad.
Esta foto es de una de las veces que crucé un puente a pie. Aquí dice: "Todo pasa." También se podría entender como que todo sigue su camino, avanza.
Arriba y abajo el largo camino electrónico para salir a la Línea de los Almirantes (así se llama una de las avenidas de la Isla Vasilevski).
Las fotos de abajo ya pertenecen al metro de San Petersburgo. La primera fue tomada muy rápidamente.


Un simpático controlador en la estación de metro, señalaba a una señora como llegar a su destino, no sin antes hacer un transbordo.


Aquí en la pared de la estación de la parada de metro Sportivnaya, que vendría a ser La Deportiva se ve a gente muy sana. Y aunque los pies no me daban para más, miraba con alegría esta imagen.

Agotada de tanto caminar movía como sea mis piernas para tratar de relajarlas un poco. Las fotos de arriba las tomé como ven en un día de la calurosa semana que estuve en San Petersburgo. Abajo se ve un poco, lo largas que son las escaleras del metro de San Petersburgo.
En algunas estaciones se escuchan las más variadas voces, desde un niño que anuncia el inicio de la escuela hasta otras propagandas como para comprar los más distintos productos. Además de la publicidad visual que se puede distinguir en una de las fotos.
La foto de arriba la tomé en la parada del metro Chernaya Rechka. Desde esta parada se puede llegar al sitio donde el poeta Alexander Pushkin fue herido de muerte en un duelo.

En las paradas de los metros la gente lee mientras espera su metro, aunque eso no suele durar nada. Bueno, es decir que continúa leyendo dentro del metro.


Puertas cerradas en la foto de la izquierda. En la foto de la derecha la estación no tiene puertas para los vagones del metro.

En las estaciones hay a veces unas puertas delante de las puertas de los vagones de metro. Es decir que las puertas de los vagones se detienen ante otras puertas para que la gente pueda salir.

En las estaciones casi siempre, y dependiendo de lo largo de éstas hay mujeres en unas casetas. A veces dan algunas instrucciones como: "¡Por favor no se detengan al lado derecho de las escaleras." Los del lado izquierdo si pueden permanecer quietos.

La parada del metro Sportivnaya es tan ordenada y limpia como las demás. Con estas explicaciones uno no se pierde, lo que sí sucede, es cansarse.

Una de las cosas que no me gusta  es que los horarios y demás explicaciones de los tranvías, buses y trolebuses estaban muy altas para mis ojos. Abajo puse dos de mis fotos de las paradas.
En el tranvía o en el trolebús hay normalmente una cobradora. Si no tienes una tarjeta del bus , entonces puedes pagar donde ella. La foto de la derecha es de un boleto del tranvía.

Sonntag, 30. August 2015

San Petersburgo/ Санкт-Петербург

Y en San Petersburgo, en el aeropuerto, me controló el pasaporte un policía joven, guapo y simpático que se sorprendió al escucharme hablar en ruso. Yo le dije que dentro de poco se me gastarían mis frases. Se sonrío. Después le quise mostrar mi viejo pasaporte donde tengo la visa para Alemania. Le dije : ¿Necesita ese pasaporte? Me respondió con un tranquilo y largo "nieeeeet" (нет). Ese "no" vendría a significar un para qué, un por qué, un para nada, un ¡no, qué va!....Al comentarle que había vivido en Ucrania y Moldavia, y que había estado sólo tres días en Moscú, me dijo con una sonrisa a flor de labios: "¿Por qué se fue?" Y yo: " Sucedió así." Una respuesta vaga a su simpática pregunta.
Me encanta la gente aquí. Por ejemplo: Un hombre me prestó su móvil para llamar a la casa donde me estoy quedando. Otro hombre me explicó como podía llegar a la isla donde estoy, y después de cinco minutos lo vuelvo a ver. Quería cerciorarse que iba por buen camino. Yo le dije: "No sé de dónde lo conozco." Se río con alegría. Mañana les cuento más. Aunque no debería dejar de lado las caras cansadas y tensas de las cinco de la tarde en el metro, son casi las mismas caras de un tren de Mannheim.


Foto de la izquierda: Saliendo del patio de la casa donde estuve alojada una semana.  
Al preguntarle al muchacho que me alquiló la habitación si era peligroso salir por los alrededores a cierta hora, me dijo: "¡Cómo va a ser peligroso si estamos en el centro de la ciudad!" Yo pensé: "Se nota que nunca ha estado en Lima, en el centro de Lima."
 La foto de la derecha muestra un balcón de la calle donde estuve hospedada. El balcón era muy bajo. Los siete días que estuve en San Petersburgo no vi a nadie en el balcón.




Torre de la Iglesia ortodoxa de Santa Catalina en La Línea de los Cadetes.


A orillas del río Nevá.
  


En el Muelle Makarov se pueden ver a dos lados. Por ejemplo uno de los palacios se ve reflejado al otro lado de la orilla del río en una descuidada casa.


De Google Maps copio el plano de la Isla Vasilevski, la isla donde estuve siete días: 

 

Abajo y arriba: Puente Birzhevoi.
 



El número siete del semáforo de abajo señala que nos quedan siete segundos para cruzar la calle. Además se escucha cuando ya no se debe cruzar o cuando se puede cruzar.



Strelka (en ruso Стрелка) es el extremo oriental de la isla Vasilievsky en San Petersburgo (Rusia), uno de los conjuntos arquitectónicos más atractivos de la ciudad, que armoniza con la arquitectura del paisaje de la orilla del río Nevá.
El nombre ruso de Strelka (literalmente 'flecha') hace referencia al espolón que se forma en la confluencia o divergencia de dos ríos o afluentes, en este caso donde se unen los dos brazos principales del Nevá, el Nevá Grande y al Nevá Pequeño.
Fuente: https://es.wikipedia.org/wiki/Strelka
Strelka con las columnas rostrales.

Desde la Isla Vasilievski se puede divisar La Fortaleza de San Pedro y San Pablo.


La Casa de Pushkin.
http://www.museumpushkin.ru/
Yo pensé que estaban renovando el museo , pero al parecer sí estaba funcionando. Bueno, de todas maneras lo visitaré en mi próximo viaje a San Petersburgo.

Regresando a La Línea de los Cadetes por el Muelle de Makarov.
La foto de arriba a la izquierda dice: Mundo del psicólogo para niños y sus padres. La foto de la derecha, también arriba es la puerta para entrar a la Facultad de Psicología. 

 Llegando de Alemania, no me quedó más que ver la cantidad de cervezas que había en un pequeño supermercado que está en todas partes. Por cierto las cervezas de San Petersburgo que probé me parecieron muy buenas. En otro post hablaré de algunos productos, incluida la cerveza de San Petersburgo.






A lo largo del Muelle del Palacio.


 En el encuentro de dos ríos se junta mucha arquitectura. Aquí (fotos de arriba y abajo) el diseño en pequeño de los alrededores.

Todas estas fotos son las de mi primer día en San Petersburgo. Llegué al atardecer. 

Fotos tomadas el día 18 de agosto de 2015 por Natalia Lévano Casas. Los comentarios también son míos.